Bandeja de salida
No había amanecido aún
era sólo la primera luz
de un nuevo día.
Intentando dominar mi vida.
Dormiré con mi sobredosis
de amor y ausencia
te echo de menos esta noche
como tantas otras
que metí dentro de un sobre
lleno de susurros
que tus labios van mojando.
Olvidé apagar las estrellas
que dejamos encendidas
en el mar de cobre... mi vida.